Interesante!!!

viernes, 23 de noviembre de 2007

***Lectura hermenéutica de “los inocentes” de Oswaldo Reynoso—(HERMENEÚTICA FENOMENOLÓGICA, TEORÍA ÉTICA DE LA LITERATURA)

Alumno: Jorge Alejandro Vargas Prado.
Curso: Teoría literaria V, profesora: Rosa Núñez Pacheco, cuarto año de Literatura. UNIVERSIDAD NACIONAL DE SAN AGUSTÍN-AREQUIPA, PERÚ.
Año: 2007


Licencias para una metáfora previa:

Imaginemos que tu madre es una puta.
Y no es sólo puta sino que también es fea, le falta un diente, huele mal y suele armar escándalos constantes después de sus borracheras.
Tú, sin embargo, la amas.
Estás conciente a plenitud de sus defectos, esos defectos te hieren aunque es de tu preferencia pensar en lo bueno de tu madre. Hace buenas bromas, es original pero poco atinada en su vestir, lee libros valiosos y te los comenta, su conversación es ingeniosa y tiene los mejores sentimientos hacia contigo.
Consideras que eres destacado, inteligente y que todo lo bueno en ti, de alguna forma, es a causa de tu madre.
De pronto recuerdas la edad en la que fuiste conciente de que tu madre era buena, en contra de lo que el mundo entero te decía; recuerdas cuando descubriste que podías hacer que la vida de tu madre, y en consecuencia la tuya, sea mejor (no solucionarla, sólo hacerla mejor); recuerdas cuando te propusiste con todas tus fuerzas hacerle aquel bien al mundo.
Estás en buen camino pero te cruzas con alguien que día a día te recuerda que tu madre es puta (lo sabes, te hiere pero persistes), que a tu madre le falta un diente (lo sabes, te hiere, comienzas a incomodarte), que huele mal (¡lo sabes! ¿y?, aún sigues creyendo en lo buena que es tu madre), día a día te cuenta el nuevo escándalo que despertó al barrio entero.
Y sin embargo esa persona no te comenta, porque no lo sabe o porque no quiere saberlo o simplemente porque es un necio improductivo, la inteligente crítica que tu madre le hizo al programa de Jaime Bayli en medio del callejón, o cuando tu madre salió con unos palos para defender a una muchacha que era asaltada en la calle, o cuando tu madre recogió a un viejo mendigo que moría para ayudarle a pasar mejor sus últimos momentos en este mundo.
Te cansas.

Yo me he cansado.


Quiero demostrar aquí, cómo Los Inocentes de Oswaldo Reynoso estando sometidos a una madre (sociedad-ciudad-país) déspota, odiosa, sucia; nunca son derrotados; cómo, pese a su juventud, son capaces de enfrentar al mundo (los adultos) y, por medio de la voluntad, intentan vivir una vida intensísima hasta las últimas consecuencias.


LOS INOCENTES:

Cara de ángel:

Cara de ángel es bello, gran contrasentido para él: su belleza es miel para abejorros mayores (adultos) y sedientos de su carne que lo persiguen para, a cambio de favores económicos, ser poseídos por él; sin embargo, él revierte la escena y juguetea con ellos, juega con su belleza pero rechaza el acto en sí. La relación con su madre soltera es ineficiente y nada productiva: metáfora exacta a la relación de los muchachos con su mismo contexto, con su país, con su sociedad que desconfía siempre de sus logros (“…mi vieja cree que ya estoy con uno de esos y, sin averiguar nada, me pega. Hoy me ha pegado. No me quiere”), su madre lo desprecia, le gruñe, le golpea pero no lo derrota; pese a su problemática familiar Cara de ángel lucha, principalmente, por dos objetivos: ser un hombre de verdad (lo que se traduce en “valiente” y luego en “dispuesto a llegar hasta las últimas consecuencias de una vida intensa”. Cara de ángel vive dispuesto a crear su propio mito, un mito que lo ayude a vivir con intensidad y reconocimiento —felicidad—, su voluntad es potente y busca ser productiva, no condena su futuro por la desgracia que le tocó vivir en un momento) y tocarle las piernas a Gilda, lo que al final completa su deseo: amar, término un poco distorsionado del estereotipo, amar significa aquí intimar físicamente, idealizar lo real de la persona, su aspecto biológico, sus olores —agradables o, lo que es mejor, desagradables—; con respecto a ello se nos presenta fuerte la imagen de Colorete, él representa con exactitud la postura de la sociedad (del país) respecto a Cara de ángel: lo abusa, lo intimida, siempre terminan golpeándose pero Cara de ángel no cede, lo quiere, lo acepta y lo entiende (“Cuando se dio cuenta que lo miraba, se avergonzó. Quise darle la mano y decirle: “Te comprendo”…), produciendo con ello, de alguna manera, el crecimiento de ambos. Es claro: Colorete ama, amor conciente de lo biológico”, a Cara de ángel.

El Príncipe:

El Príncipe tiene el sendero de su vida marcado por su apodo, cedido por el homosexual que dirige la peluquería: Manos voladoras (“…tú tienes toda la facha de un Príncipe… No hay necesidad de ver príncipes de verdad para imaginarse cómo son”). Tenemos aquí algo resaltante, pese a manejar todos ciertos códigos machistas, el homosexual no es discriminado ni atentado en ninguna forma; el trato constante ha hecho de “esas personas” productivamente tolerantes.
Después de su aparición en los periódicos la mayoría joven lo admira, Manos voladoras reflexiona acerca de la honestidad de los adjetivos en la manera de vivir (“…ser roc no sólo es usar bluyins y camisa roja: eso, es cáscara. Ser roc significa, significa… bueno, por ejemplo, hacer lo que ha hecho el Príncipe”), considera, independientemente del carácter positivo o negativo del término, que no basta con ser llamado como algo, sino que se tiene que ser ese algo viviendo hasta las últimas consecuencias. Para Manos voladoras aquello es primordial y hermoso, en cambio para don Lucho, dueño de La Estrella y amigo del papá del Príncipe, es inaudito y dañino. Nos enfrentamos en este punto a una dialéctica: para los jóvenes la actitud del Príncipe es admirable, sin importar las consecuencias negativas, por la sinceridad de sus actos (lo que luego desemboca en la efervescencia de los demás muchachos para probar que el mundo ya los ha reconocido de manera extraordinaria, voluntad de construir mitos); en cambio para los adultos, don Lucho y el auxiliar López, aquello resulta penoso. En el caso de don Lucho la solidarización con el papá del Príncipe surge más por una cooperación coetánea que por alguna cuestión de sinceridad. Con respecto al auxiliar López, su torpeza y estupidez construyen en el Príncipe el rechazo a una generación de la que no es parte (y la cual está en su contra, es atacado por ella: “Lloro, lloro inconsolablemente. Todo está perdido, estoy solo, solo y tengo ganas de morirme”, pero que al final nunca logra derrotarlo: “Ya no recuerda que ha despertado llorando”), la rechaza y la enfrenta por medio de la voluntad para hacer realidad su mito: “¡Y cómo, en la Ciudad de los Reyes, un Príncipe sin auto y sin plata!: la hueva, compadre.”

Carambola:

Carambola maneja su identidad con respecto a Choro Plantado, que representa un indeseable de la sociedad que los contiene y que además fue quien lo bautizó, sin embargo Carambola desea ser como él. Una esfera mística (mítica) envuelve el relato desde que se plantea el primer enigma “él, sólo juega para liberarse”. Pese a ser un ex convicto por el asesinato de su mujer “él es bien derecho, juega sin trampas y castiga a los torcidos”. Una sociedad lo ha castigado, lo ha herido pero ya fuera de la cárcel parece haber fortalecido su moral. Carambola se siente excluido por sus padres “Yo no soy mocoso y nadies me importa y… además, a nadies le importo en mi casa” y busca un nuevo refugio en Choro Plantado quien, tras una oleada de sinceridad, reflexiona de manera positiva y productiva de la vida, incitando en Carambola la voluntad de vivir una vida intensa hasta sus últimas consecuencias, disfrutando, teniendo pasión: “Yo sé que tú quieres ser el trome del billar; pero, para eso, no sólo basta saber manejar el taco. Hay que tener pasión por el juego. Por la vida, Carambola.” Luego, Carambola descubre que Choro Plantado juega para liberarse del peso que la vida deja en el corazón de la gente golpeada, él ha sido golpeado, humillado por la sociedad pero su visión positiva de la vida no cambia; se siente aceptado nuevamente al salir, nadie lo cuestiona ni se interesan en señalarlo, quiere a la gente de su sociedad: “…porque aquí todos son buenos… Y ahí vamos, Carambola, jalando, tirando pa’delante…”.
Por último Carambola rechaza a ciegas el único concepto pesimista que Choro Plantado menciona, ninguna mujer es buena; Carambola aún no ha experimentado en la materia como para tener una conclusión pero prefiere creer, prefiere ser optimista y Choro Plantado, aún sabiendo la verdad, prefiere mantener el mito.

Colorete:

Colorete persigue los mismos objetivos de Cara de ángel: quiere ser adulto (lo que significa ser valiente. Su situación resulta más traumática que la del muchacho hermoso pues su “cobardía” se relaciona directamente a entablar relaciones con el sexo opuesto y no con los demás varones, cosa contraria en Cara de ángel. En un primer momento, se nos presenta como el líder del grupo, al que todos admiran o al menos respetan; pero los papeles se revierten: en su situación desencantada él es capaz de estetizar su tristeza sin razón por medio de guarachas, cosa rara pues sus amigos y las personas en general suelen alegrarse con guarachas, él termina deseando ser como sus amigos ) y desea el amor de una muchacha: Juanita, nuevamente la idea de un amor poco estereotipado regresa con fuerza: “Me apretaré a tu cuerpo. Te oleré de cerca” y en la visita a la playa, al olfatear sus ropas: “tenía un olor suave, húmedo”. Colorete persiste en sus ilusiones, aunque está casi seguro de que Juanita ya no es la pequeña de quince años que supone le envió el colorete en una carta anónima. Persiste y lucha por ellas hasta el final. De alguna manera el término del cuento nos deja una interpretación por abrir: Juanita desprecia a Colorete (encuentro para el cual Colorete se había preparado durante todo el cuento y que requiere la derrota de muchísimos de sus miedos e inseguridades) y se va con un muchacho con más prestigio debido a su carrera universitaria; nunca sabemos la reacción de Colorete aunque teniendo en cuenta todas las pistas recogidas a lo largo del libro propongo una derrota dolorosa pero (de alguna manera, en la “cáscara” al menos) fácilmente superada. Una derrota que lo impulsará con nuevos bríos a buscar un rumbo mejor.

Rosquita:

Por último, el Rosquita, el más niño de todos. Su llanto incontrolable lo delata pero él quiere ser a toda costa un adulto que va a lugares prohibidos, a cantinas (en lo que él engloba la libertad), llama a los muchachos que suelen golpearlo como “torcidos” y es justamente por ello que la tristeza lo invade, en su conciencia está que su edad convive con la perdición, que sus amigos tal vez están tomando un rumbo que él considera peligroso, de ahí su posición evolutiva: él desea con fuerza ser adulto pero no un adulto como con los que convive, sino un adulto pleno, libre: recto.


A modo de conclusión

Ninguno es derrotado. Tal vez resultan heridos pero se recomponen de inmediato y con más fuerza, para demostrarle al mundo su ineptitud (mayoritariamente representada por adultos), los inocentes mantienen sus esperanzas y sueños. No se resignan, no se abandonan ellos mismos ante el abandono de su madre (familia-sociedad-país), sino caminan, corren entusiasmados tras su propio mito, mitos que suelen ser exasperantemente sinceros, para alcanzar lo que aman: una mujer, representación del amor real-biológico-conciente, y una adultez diferente de la que ven, para sacarle la vuelta a su destino, para hacer de sus vidas nuevas un sincero y hermoso espectáculo en el cielo.

Bibliografía:

-REYNOSO, OSWALDO. Los Inocentes. Editorial San Marcos. Lima-Perú, (edición del 2002).
-MATURO, GRACIELA. La razón ardiente. Editorial Biblios. Buenos Aires-Argentina, 2004.

18 comentarios:

Francisco Joaquín Marro dijo...

No he leido los inocentes, quiza porque cuando una obra se vuelve canon del discurso ofical ,m perde su atractivo, pero con el goce de la piel, Reynoso se ha apuntado entre mis favoritos..que tal lectura revolucionaria de la homosexualidad..y eso que no soy socialista...) y es curioso, antes tenia la impresuion de que reynoso era homofobico...lo

Jorge Alejandro Vargas Prado dijo...

Saludos!
Oswaldo Reynoso es homosexual hace tiempo. Y yo chupé con él en Arequipa. yeeeeeee!!!! Mira, acá también hay una entrada de un análisis de género sobre los Inocentes. Gracias por visitar el blog!!!!

Francisco Joaquín Marro dijo...

QUE REYNOSO ES QUEEEEEEEEEEEE????? cuenta, maldicion, cuenta
y eso se sabe en el ambiente literario? pucha, esos de VANO OFICIO deberian infomar mejor

Jorge Alejandro Vargas Prado dijo...

Claro pe!!!!!!!!! Reynoso es homosexual hecho y derecho y él siempre lo dice!!!!! no sabías??? pero todo el mundo lo sabe!!! Y yo chupe con él... pero sólo hablamos de literatura!!!!!! kekekekekekek duro duro duro

scheherazade dijo...
Este comentario ha sido eliminado por un administrador del blog.
Jorge Alejandro Vargas Prado dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
Jorge Alejandro Vargas Prado dijo...

maldición!!! no sé por no se ven las tildes.. por si acaso acá te dejo del mensaje pero sin tildes pe.. para que no tengas problemas:

Hola Desiree!!!
huao!!! que emocion que recibamos visitas desde tan lejos... me hubiera gustado responderte directamente pero no puedo ver tu perfil... bueno, hablas muy bien el espanol!!!!
Bueno, "rocanrolero" viene a ser literalmente un "rocker" alguien que escucha la musica rock. Pero en este caso se trata mas de una manera de vivir la rebeldia (que supongo que en esas epocas significaba el rock), obviamente esta rebeldia esta vinculada con actitudes cool o de "valientes" pero esto solo como una especie de "mascara" para el verdadero sentimiento: la honestidad con lo que se cree. El ser roncanrolero, como bien dice Manos Voladoras, no es solo "vestirse" o tener "poses" sino vivir de manera sincera con tus pensamientos, llevando la vida hasta el final. Viviendo la vida hasta las ultimas consecuencias... supongo que va por ese lado pues Reynoso siempre dice eso de vivir hasta las ultimas consecuencias. ajajaja he tenido la oportunidad de tomar unas cervezas con el!!! ajajaja espero que te ayude... muchas gracias nuevamente!!!

scheherazade dijo...

Hola Jorge!

Jajaja ya ves, que tanto puede hacer posible google y el internet ;-)

Muchas gracias por tu respuesta tan rápida! Y gracias por halagarme por mis conocimientos del español! (Es que me ENCANTA este idioma!!)

La verdad me ayudó mucho lo que dijiste. También estuve pensando en analizar algo en aspecto de ser rebelde (y sobre todo PORQUE)y eso. pero bueno, ya lo veré. (tengo que entregarlo el 21 de abril y hasta ahora ni si quiera empecé a escribir, y el hecho que es es español no lo facilita... :-S).
Pero creo que después de haber acabado el trabajo necesito leer más de reynoso!

Y si, no tengo perfil aquí, porque todavía no tengo un blog. pero en junio abriré uno para comentar un viaje que voy a hacer ;-)
Pero vi el tuyo y parece que tenemos algo en común: la poesía. Solo que yo no escribo muy profesional.

Muchos saludos y gracias de nuevo!

Jorge Alejandro Vargas Prado dijo...

oe estoy huasca... o sea... borracho... ebrio... amo esos lugares de Europa-- vendrás algún día???? yo te ayudaré!!!! estoy ebrio!!! te amooooooooooooooo

Jorge Alejandro Vargas Prado dijo...

Dios mío!!! qué vergüenza lo de ayer!!! ajajaja no debo publicar cosas ebrio!!!!
ajajaja amamos la poesía!! yeaaaaaaaah!
saludos y disculpa el atrevimiento!

scheherazade dijo...
Este comentario ha sido eliminado por un administrador del blog.
Jorge Alejandro Vargas Prado dijo...

I cant!!!! abuuuuu... por qué me pides que borres tus mensajes???? bueno bueno... si lo deseas lo haré... pero... hay necesidad de borrarlos todos??? dime cuáles... es que están tan lindos!!! ya ya ya ya???? dime cuáles y los borro... intenta que no sean todos ya?
abrazos!!!!

scheherazade dijo...

hmmmm.... no sé... el primero?
Saludos, D.
(entonces ya funcionará con mail)

Jorge Alejandro Vargas Prado dijo...

:-p todo comienza:
perrito87@hotmail.com
adivino que r�es... ajajaja...
abrazos!!!

Anónimo dijo...

Texto: rotundo, cuasi poético.
Comentario del autor: idiota, soez, estúpido.

Al decir esto:
"Claro pe!!!!!!!!! Reynoso es homosexual hecho y derecho y él siempre lo dice!!!!! no sabías??? pero todo el mundo lo sabe!!! Y yo chupe con él... pero sólo hablamos de literatura!!!!!! kekekekekekek duro duro duro".

el autor del post demuestra la inestabilidad, inmadurez y falta de marco teórico adecuado para juzgar a un artista tan completo y complejo como es Oswaldo Reynoso. Reynoso nunca ha afirmado que es homosexual; lo sé porque tengo todas sus entrevistas, además lo conozco personalmente, incluso lo considero mi maestro. Es inafame entonces aplicarle calificaciones que están fuera de lugar sin alguna prueba convincente.
No quiero explayarme más porque sé que me entiendes.
Lástima que con tu comentario desmerezcas la calidad del tu artículo.

Lástima.

Saludos.

Anónimo dijo...

Una lástima que la gente aún no comprenda el culto al cuerpo y su filosofía pura y purista, el sentido de amor antrológico y antropomorfo del maestro Reynoso.

Saludos afables.

Te dejo mi correo, por si me tiwnes algo que responder:

argeo_paul@hotmail.com

Jorge Alejandro Vargas Prado dijo...

Hermano:
Primero, muchas gracias por visitar el blog, gracias por ser amable con mi texto. Mira, Reynoso es mi maestro también, amo con pasión lo que escribe y, para aclarar las cosas, en el Lire en Fete del 2007 en Arequipa Reynoso dijo literalmente: es que yo soy revolucionario y yo soy homosexual.
Además, al afirmar que es homosexual no busco degradarlo en ningún sentido, sabiendo además que el muchacho con el que comentaba y yo compartimos otras tendencias sexuales que no necesariamente son las "normales". Lo del amor puro y purista, bueno, simplemente disfruto y amo terriblemente lo que escribe Reynoso, él me hace creer.
Quisiera decir que es una verdadera lástima las personas que consideran la homosexualidad como algo insultante pero es por gusto.
Muchas gracias nuevamente.
Y todo con un poco de comunicación se soluciona. :-p
Un gusto.

Unknown dijo...

Me parecen inncesarios los comentarios sobre la sexualidad de Reynoso, sin soslayar por supuesto que no estamos hablando de algo malo (el no ser heterosexual). Simplemente esa chismoseria solo hace que los lectores sigan anclados en enfocarse en el autor, cuando la atencion debe de centrarse en el producto literario.
Reynoso lo dijo en la presentacion del "Goce de la piel" en Lima, hace ya casi un lustro.
Tildes omitidas.